Las oposiciones son una carrera de desgaste, donde hay que tener siempre claro que presentarse a una oposición es algo que no se limita a estudiar, hay que pensar en si realmente queremos dedicar tanto tiempo y si va a ser posible. Desde luego que la recompensa merece mucho la pena. Eso sí, tenemos que tener claro en que hay que renunciar a muchas cosas si se quiere uno preparar bien, especialmente, como es de imaginar, el tiempo libre. En estos últimos años, hemos podido ver como la crisis o la escasez de ofertas laborales han terminado por dar más valor de la que ya tenían a las oposiciones. Por todo ello, muchas de las personas que terminan una carrera lo que hacen es ponerse a opositar, como ven en Preparadores Valladolid en buena parte de sus alumnos. Conseguir un puesto de trabajo fijo para el resto de su vida laboral es el objetivo.
