España es un país realmente único en lo que respecta a una buena nómina de factores. Las condiciones climatológicas en las que se encuentra ubicado tienen una incidencia bastante importante en la cantidad, la calidad y el tipo de los productos alimentarios que nacen en el interior de esas fronteras. Incluso, es bastante habitual el comentario de que las condiciones climáticas juegan un papel bastante grande en el carácter abierto, campechano y solidario de nuestra gente. Lo cierto es que no cabe duda de que somos culturalmente únicos.
Lo que también nos hace únicos culturalmente es esa conciencia colectiva relativa al mimo hay que dedicarle a los productos que aquí se desarrollan. Uno de ellos es, como muchos seguramente sepáis, el vino, un producto que necesita de un cuidado sumamente especial y del que depende buena parte de la imagen de España más allá de nuestras fronteras. Suele decirse que el vino es uno de nuestros grandes embajadores y es que esa bebida es sinónima de buen gusto y de un trabajo colectivo perfectamente cohesionado y perfeccionado.
Un artículo del diario El País ofrece una información que resulta de especial utilidad a la hora de entender esa importancia que tiene el vino para España. Según dicha noticia, un país como Italia es el que más vino produce en todo el mundo, pero sin embargo es España quien más vende, algo que pone de manifiesto que aquí realizamos un buen trabajo, que encuentra en el mimo y la dedicación uno de los pilares que hacen de nuestros productos vinícolas mucho más especiales. El artículo concluye asegurando que, por otra parte, es en Estados Unidos donde más se consume este vino.
En cuanto a la producción, es importante resaltar otro de los datos con los que nos hemos dado de bruces a lo largo de todos estos últimos años. Uno de ellos es el que nos proporciona el portal web EAE, que asegura que España es el tercer productor mundial de vino con una cifra aproximada de 37’8 millones de hectolitros. Y es que, como comentábamos al principio de este escrito, España presenta unas condiciones ideales para la producción de ciertos productos, siendo el vino no solo uno de ellos, sino uno de los más relevantes.
El vino es uno de los productos que cuentan con mayor arraigo en toda España. Fruto de ello es el consumo que hace la gente de ellos, un consumo que se ha reactivado tras la crisis y que ha llevado a que la gente, según nos han comentado los profesionales de Exportcave, a comprar todo tipo de productos asociados a él, como copas de vino especiales o vinotecas. La verdad es que la tradición con la que cuenta el vino en España y el empeño que se pone de parte de todos los implicados en la cadena de producción es lo que nos hace, en este caso, ser culturalmente diferentes a otros países en los que se produce vino de manera habitual, como Francia o Italia.
Somos el rival a batir
Eso es lo que piensan muchos países productores de vino con respecto a España. Nuestro país es una referencia no en cuanto a la calidad de vino que exporta, que también, sino por la calidad de sus productos. Y es que la enorme cantidad de Denominaciones de Origen que tienen lugar aquí ponen de manifiesto que el trabajo que se hace en España con este producto es genial. Hay que incidir en este trabajo y continuar mejorando para seguir ganando confianza entre los consumidores.
Seguro que muchos y muchas habéis visto las exposiciones de vinos que se han puesto, con motivo de la Navidad, en multitud de supermercados y grandes superficies. Seguro que también muchos y muchas os habéis topado con un caldo que todavía no conocíais y que os ha llamado la atención de una manera bastante poderosa. El del vino es un mundo fascinante y eso lo podemos comprobar con la enorme cantidad y variedad de caldos que nuestro país tiene para ofrecer.
Los datos de consumo avalan que este producto sigue siendo bien consumido en España. Somos optimistas en ese sentido de cara a este 2019. De este vino dependen muchas personas y otras tantas empresas que tienen una relación indirecta con el producto. Este es el principal motivo por el cual no se puede permitir bajo ningún concepto que se pierda el arraigo, la tradición y todo lo positivo que genera este producto para este país. Este es el tipo de producto que nos permitirá seguir siendo únicos en el mundo.