Muchos estudiantes deciden aprender francés para obtener más opciones a nivel laboral. Además, es la única lengua junto con el inglés que se habla en los cinco continentes.
Incluso, en muchos países es la segunda lengua que se estudia en los institutos. Es una lengua oficial en países como Suiza, Bélgica, Canadá, Luxemburgo, Andorra, Mónaco, Líbano, Vietnam, Marruecos, Túnez, Camerún…
Algunos estudiantes deciden aprender este idioma a distancia, ya que los cursos en línea ofrecen temarios, ejercicios y simulacros de exámenes oficiales.
Aunque también puedes elegir los cursos de francés en Francia. En este país escuchas la pronunciación correcta y aprenderás mejor el idioma al estar conviviendo con las personas que lo utilizan.
Los profesionales de Vilimi idiomas nos cuentan las ventajas de escoger estos cursos:
-Es muy aconsejable conocer personas de otras nacionalidades y culturas.
-Los estudiantes conocen las costumbres y gastronomía del país.
-Estos cursos son idóneos para mejorar la pronunciación y aprender un vocabulario más amplio.
-Los profesores cuentan con una titulación específica para la enseñanza del francés.
-Los alumnos aprenden el idioma de un modo más natural, ya que conocen las expresiones coloquiales.
-En las clases hay una gran cantidad de recursos digitales entretenidos y adaptados al nivel de los estudiantes.
En este país pueden descubrir los platos típicos, como la quiche lorraine. Esta tarta salada se prepara con masa quebrada o pasta brisé.
Los expertos explican que para conseguir una textura crujiente es aconsejable hornear la masa antes de rellenarla.
Los ingredientes son huevos, crema de leche (‘crème fraîche’) o nata, sal, pimienta y panceta ahumada. Aunque esta receta también admite otros ingredientes como puerro, calabacín, jamón, queso, etc.
Pero es cierto que la quiche es perfecta para aprovechar sobras de nevera bien desmenuzadas. Aprovecha la carne desmenuzada con cebolla caramelizada, unas gambas con pescado, brócoli con queso azul, etc.
«Se trata de una tarta originaria de la región francesa de Lorena, al noreste del país, ya frontera con Alemania. Quizá de ahí su nombre, puesto que la palabra ‘quiche’ proviene del término germano ‘kuchen’, que significa tarta. Esta receta, con su nombre original, surgió en el siglo XVI. En su origen, no se rellenaba más que con huevos y nata. El bacón, característico de la receta actual, no llegaría hasta el siglo XIX», informa la revista ¡HOLA!
Una de las recetas más icónicas de la gastronomía francesa y que cuenta incluso con su propio ‘Día internacional’, celebrado cada 20 de mayo.
Las posibilidades a la hora de preparar una quiche son muy variadas: de jamón, de champiñones, de verduras, frutos secos, pescados, carnes, conservas…
Si estás estudiando en Francia y quieres preparar la quiche lorraine, te aconsejamos que compres bacon o panceta ahumada, nata, huevos y queso.
Para la base tienes dos opciones: o bien elaborarla de forma casera, o bien comprarla ya preparada en el mercado.
La masa quebrada (también llamada pasta brisa) se prepara con harina, huevo, mantequilla fría y sal. A la hora de cocinar esta receta de la gastronomía francesa, ten en cuenta los siguientes consejos:
-Prepara la masa quebrada, estira con el rodillo y colócala en un molde redondo, como los de hacer tartaletas. Pero es aconsejable colocarla bien, presionando por el fondo y las paredes.
-Si quieres darle más sabor puedes añadir alguna hierba aromática o una pizca de nuez moscada.
-Es aconsejable forrar la base del molde con papel vegetal. Así, tendrás la garantía de que podrás desmoldarla con más facilidad.
-Te aconsejamos hornearla previamente, sin el relleno, durante unos 10 minutos. Para que no se suba puedes pinchar con un tenedor o poner unas legumbres. Con este truco conseguirás que se endurezca un poco y no se reblandezca cuando coloquemos el relleno encima.
-No olvides de precalentar el horno a 200ºC aunque luego bajes a 180ºC. Una vez que tengas la masa colocada en el molde, hornea durante unos 30-35 minutos a 180ºC.
-Vuelca el relleno elegido para tu quiche sobre la masa quebrada. Prepara el relleno con nata, pero también puedes utilizar la crème fraîche, esa crema de leche ligeramente ácida con un 30-40% de grasa.
-Añade algún tipo de queso rallado o en trozos, ya que va a contribuir a darle textura. Pero lo mejor es elegir un queso cremoso.
-Saca con cuidado del horno y deja que se temple un poco, aunque también puedes tomarla fría.
-Elige una guarnición de verduras asadas o a la parrilla.
-Pasa la quiche a un plato original, pero también se puede servir en porciones individuales. ¡Un plato que será celebrado por tus amigos franceses!
